Luego de casi un mes en la Argentina, Benedict Cumberbatch dejó el país junto a su esposa, Sophie Hunter, y sus hijos Christopher, Hal y Finn.
El actor británico que protagoniza la saga de Doctor Strange había llegado con un bajo perfil y fue descubierto por una fanática mientras paseaba por Palermo a mediados de septiembre.
“Lo más random y emocionante de mi vida: ir a plaza Armenia y encontrarme con el mismísimo Benedict Cumberbatch”, escribió una usuaria de Twitter, junto a una series de imágenes del actor. Y agregó: “Chicos, encima es divino, un amor mal él y su esposa. Se subía a los jueguitos de la plaza”.
Desde entonces, el protagonista de Sherlock y Código enigma fue sorprendido por varios fanáticos que se acercaron a saludarlo y le pidieron una foto. Y aunque intentó pasar desapercibido al usar mascarilla y lentes de sol, no dudó en acceder a la demanda de su público argentino. Lo cierto es que durante su estadía, aprovechó para hacer turismo en Buenos Aires y entre los lugares que visitó se destacan el MALBA y el restaurante de Germán Martitegui.
El motivo principal del viaje fueron los compromisos laborales de su esposa, ya que la directora de teatro estuvo a cargo de la escenografía de dos óperas que se estrenaron en el Teatro Colón el pasado 27 de septiembre. Y su familia, la acompañó durante los días previos y en el esperado debut, en el que el actor intentó no llamar la atención para que Turner tuviera todo el protagonismo.
Y una vez finalizado el trabajo de Sophie, los cinco viajaron a la Patagonia en un avión privado que partió desde el aeropuerto de San Fernando. Allí, finalmente pudieron disfrutar de unos días de descanso, rodeados por los imponentes paisajes del sur argentino.