El Congreso de EE.UU aprobó un proyecto de ley el viernes pasado que solicita a la Directora Nacional de Inteligencia, Avril Haines, desclasificar información sobre el origen del COVID-19.

La propuesta la elaboró el senador republicano Josh Hawley y cuenta con la luz verde del Senado y la aprobación unánime de los 419 miembros de la Cámara de Representantes. Solo falta la firma del presidente Joe Biden.
El proyecto busca desclasificar cualquier indicio de investigaciones sobre el virus en el laboratorio de Wuhan previas a la aparición de la COVID-19, así como el registro de enfermedades en empleados durante el otoño de 2019. Además, se espera identificar su origen a fin de tomar medidas pertinentes para evitar futuras pandemias. De aprobarse la ley, la desclasificación deberá ocurrir en los siguientes 90 días.
Estados Unidos es de los principales impulsores de la teoría sobre que el virus se creó en un laboratorio, contrariamente a las creencias de que surgió por transmisión de un animal a un humano en un mercado callejero de alimentos. A fines de febrero, el director del FBI, Cristobal Wray, dictaminó que la pandemia fue “probablemente” causada por una fuga en un laboratorio en Wuhan y apuntó al régimen de Xi Jinping por interferir en las investigaciones que viene realizando la comunidad internacional. A pesar de esto, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Juan Kirby, reconoció que dentro de la Administración aún no hay consenso sobre estos hechos.