Debido a los últimos aumentos del precio de la nafta y del transporte público, la Asociación Judicial Bonaerense exige un urgente aumento de la movilidad fija y adicional. El aumento de la movilidad que se definió en diciembre y que se aplica a partir del 1º de febrero ya quedó desactualizado, no alcanza y dificulta la realización de las diligencias. A su vez la movilidad adicional no fue actualizada.
De la Redacción de EL NORTE
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“Estamos frente a una situación de emergencia, el excesivo aumento de todos los precios, y en particular del transporte público y de la nafta, hace imposible que las y los trabajadores de las Oficinas de Mandamientos y Notificaciones, de Juzgados de Paz y trabajadores sociales puedan realizar todas sus tareas con el monto de movilidad fija actual”, manifestaron desde la Asociación Judicial Bonaerense (AJB). El gremio reitera la necesidad de que los aumentos sean automáticos y estén atados al precio del combustible, teniendo como referencia el valor de 15 litros de nafta súper diarios.
Debido a los últimos aumentos del precio de la nafta y del transporte público, el sindicato provincial exige una urgente suba de la movilidad fija y adicional. El aumento de la movilidad que se definió en diciembre y que se aplica a partir del 1º de febrero ya quedó desactualizado, no alcanza y dificulta la realización de las diligencias. A su vez la movilidad adicional no fue actualizada.
“Generará atrasos”
“En momentos de alta inflación la forma de actualización de la movilidad que realiza la Corte es totalmente insuficiente y cuando se realiza llega tarde y no soluciona el problema. Se hace imposible seguir notificando todas las diligencias con los valores de la movilidad actual, lo que generará un atraso que no es culpa de las y los trabajadores, sino de la falta de recursos”, sostuvieron desde la Comisión Provincial de Mandamientos y Notificaciones.
Desde la AJB San Nicolás, la secretaria general Analía Maiztegui analizó consultada por EL NORTE: “El tema de la movilidad afecta a todas departamentales por igual. Es un concepto que cobran los trabajadores y trabajadoras que desarrollan sus tareas por lo menos parcialmente en la calle, es decir que tienen que moverse y que normalmente utilizan sus vehículos particulares. Ese importe que hoy se está pagando de la movilidad no solamente no compensa ni siquiera el combustible, sino que está lejísimo de cubrir roturas, desgaste, mantenimiento, que es algo que terminan poniendo de sus bolsillos lo compañeros. Hace muchos años que venimos reclamando un método de actualización automática, desde la AJB sugeríamos que podía ser un equivalente a 15 litros de nafta súper, abiertos a otras propuestas. La Corte se niega a discutir en esos términos, los aumentos terminan siendo determinados de manera unilateral y cuando se actualiza, siempre se queda atrás, más aún con los permanentes aumentos de la nafta. Hay compañeros –sobre todo de las dependencias descentralizadas– que las distancias que recorren son muy grandes más poder notificar. A veces van por ejemplo, a Conesa, Rojo. En esos casos está poniendo plata de su bolsillo para poder trabajar”.
Recomendaciones
Ante esta situación, la Asociación emitió un comunicado en el que indica a las y los trabajadores del sector: “No es obligatorio que las y los oficiales pongan a disposición de la Corte sus vehículos particulares para realizar las diligencias. Y recomendamos no hacerlo ya que es imposible hacerse cargo de los gastos que se generan por el uso y mantenimiento. En caso de que la movilidad diaria no alcance para realizar todas las diligencias que se le entregan en el día, es necesario presentar nota al jefe/titular de la dependencia para que tome conocimiento y consulte por la solución a sus superiores. En caso de que una diligencia no se pueda realizar con el monto de la movilidad diaria porque para llegar al domicilio se debe gastar más, también se deberá presentar nota al jefe/titular de la dependencia para que consulte a sus superiores ya que las y los trabajadores no podemos poner plata de nuestros bolsillos para realizar las tareas que se nos asignan. En idéntica situación se encuentran las y los peritos trabajadores sociales que para realizar sus tareas deben trasladarse fuera del juzgado o dependencia”.